Extorsiones telefónicas - modalidades

persona hablando con su teléfono móvil
persona hablando con su teléfono móvil

1.- Básicamente y de modo coloquial, consiste en la presión que se ejerce —mayormente— telefónicamente sobre alguien mediante amenazas u otros ardides, para obligarlo a actuar de determinada manera y obtener así dinero u otro beneficio. Existen distintas modalidades:

2.- Extorsión directa: Se concreta cuando un sujeto se contacta de manera personal con la víctima y, en su presencia, le exhibe fotos de su familia, tomadas precisamente ese día por la mañana cuando lo despedían en la puerta de su casa. El delincuente afirma tener secuestrados a sus familiares por medio de unos cómplices y exige que le entregue una cantidad de dinero, pues de lo contrario les hará daño.

3.- Extorsión indirecta: se da cuando la víctima recibe una llamada o mensajes escritos en donde se le exige una determinada cantidad de dinero, a cambio de no hacerle daño a él o su familia.

4.- Pedidos especiales: Se le exige telefónicamente a la víctima depositar determinada cantidad de dinero en un lugar solitario, haciéndole expresa mención de que, de ser detenidos, la familia sufrirá las consecuencias.

5.- Modalidades: familiar secuestrado, familiar accidentado, familiar detenido, ganador de un presunto concurso, etc. Luego, a través del engaño y las amenazas, los delincuentes obligan a las víctimas a pagar un rescate; también amenazan con dañar a la(s) parte(s) si llaman a la policía o alertan a las autoridades.

6.- La mayoría de los esquemas o modus operandis utilizan varias técnicas para infundir sensación de miedo, pánico y urgencia en un esfuerzo por apresurar a la víctima a tomar una decisión rápida. Las instrucciones generalmente requieren que el pago del rescate se realice de inmediato y, por lo general, mediante transferencia bancaria. Estos esquemas implican cantidades variables de demandas de rescate, que a menudo disminuyen a la primera indicación de resistencia.

7.- Los delincuentes a menudo hacen todo lo posible para involucrar a las víctimas en conversaciones continuas para evitar que verifiquen el estado y la ubicación de las personas presuntamente "secuestradas", “accidentadas” o “detenidas”. Las personas que llaman a menudo hacen creer a sus víctimas que están siendo observadas y que fueron atacadas personalmente. En realidad, los perpetradores, simplemente están haciendo cientos de llamadas, posiblemente usando directorios telefónicos u otras listas telefónicas o datos proporcionados, por ejemplo, por hackers.

8.- El advenimiento de la IA (inteligencia artificial), la astucia de los estafadores  y la complejidad de las maniobras hacen que debamos estar muy atentos, hoy con el entrenamiento de modelos de IA es muy sencillo imitar voces y hasta generar videos falsos de personas.

9.- Los esquemas citados y otros en auge, provienen mayormente —aunque no exclusivamente— desde el interior de cárceles.